lunes, 9 de marzo de 2015

QEPD

Una compañera y amiga de la compañía de Teatro en la que estaba hasta hace unos días y que tuve que abandonar por motivos de muchísimo trabajo, fue víctima de un espeluznante accidente junto con los suyos. Un evento de pesadilla que no le desea ni al más acérrimo enemigo, promovido por la inseguridad de nuestro México, fue el causante de que su madre dejara esta dimensión. 

Con mi más sentido pésame y el deseo profundo de que ella salga adelante desde el espíritu hasta sus ánimos, le dedico a ella una caricatura de esa personita que ahora vive en su corazón como única presencia física.

¡Estoy contigo, Clarissa!

No hay comentarios:

Publicar un comentario